LA MANO QUE APRIETA

sábado, 17 de marzo de 2012

los 48 números de Más Allá

Es curioso cuando esos seres virtuales -también mecánicos-, esos fabulosos monstruos que se ven en películas actuales, se presentan en la vida real. Tan desvastadores como en el cine pero también más efímeros, generalmente sustentados por un silbidito que puede convertirse en el tronar de una sirena marítima (ulular casi humano que se escucha en la inmensidad de los océanos).
Es algo que no debería suceder porque asombra demasiado y provoca infartos gratarolos.
Según el filósofo Nicola que le da duro a la medieval, estos metamorfos degenerativos serían habitantes cerebrales (personales) de moribundos (definidos o indefinidos) que colaboran con el paro cardíaco del mortal en cuestión ("¡Caray! ¿Qué es esto!"). A su vez, estos plasmas nervudos y atroces serían los encargados de guiar las almas al Más Allá (a la colección completa desa buenísima revista de los cincuenta), mordiendo el culo de los desfallecientes.

Volante publicitario a color (fragmento).

2 comentarios:

Mi Compadre: Pa morder culos llamelo nomás al Matias , es el Perro de los Pajuelos , dizque que tiene sangre de los mastines de los godos , que trajeron ellos y anduvierón por todo Mexico si que nos rompierón el culo Mi Cuate...pos fue así...

Si uno hubiera vivido toda la vida sin moverse. O sea sin conocer Egipto ni La Quiaca, la colección completa de Más Allá, sería una realidad más asumida, más entendida.