LA MANO QUE APRIETA

martes, 7 de septiembre de 2010

Antonio Pérez Prado, a un año.

Tenías razón Antonio, internet es desconfiable. Te estaba recordando aquí, por escrito, y de pronto se cortó todo. Quel gobierno está peleado con fibertel, que alguien se afanó un cable, que Dios existía realmente... Yo que sé. La cuestión que había descubierto la forma de charlar con vos y ahí, el asunto se desconectó. Lo que te estaba escribiendo desapareció y no volvió cuando volvió internet.
Nada más fiel que la puñetera lapicera o la máquina de escribir. Tenés razón y no te lo volveré a discutir.
Pero aquí estamos.
Te decía que te hicieron el homenaje que Paco había prometido hacerte en vida. Ahí en la Federación. Vitrinas llenas de tus cosas y la biblioteca de la institución enriquecida con tus libros gallegos. A mí me hubiera gustado que te hicieran el homenaje con vos vivito y coleando. Hubiera sido más teatral, más cierto...
Estoy haciendo de cuenta que estamos charlando por teléfono, hoy, que hace un año te fuiste y aunque esta charla sea irreal porque estás muerto, te escribo para que me escuches. Porque eso era lo bueno. ¿Te acordás que llegó un momento que te dije "Pero... vos sos como un padre para mí". Estábamos hablando por teléfono. Hiciste un silencio circunspecto y corregiste: "En todo caso, un hermano mayor". Sabías más que yo de todo, y me lo explicabas. Teóricamente, ahora que me dejaste solo, yo debería ser autosuficiente, pero igual te consulto y me contesto por vos, y sos vos el que no me deja engrandecerte con palabras. No merecés esa traición de mi.
Durante este año de tu ausencia, pasaron cosas. Cosas más importantes que el homenaje, y que, que tus escritos y correspondencias estén en la fundación de Galicia donde vos querías que estén, para que las estudien.
¿Sabés las cosas que me contaron de vos, Graciela tu mujer durante 40 años, y tu hija? Me revelaron un Antonio tan mágico que conociéndote como te conocía yo, solamente podía presentirlo. Pero, tal vez sin quererlo, estos seres realmente queridos, me revelaron una llave que trasciende la anécdota. Es más, me impulsaron a recrearte, escribir sobre vos. Pero no para describir la acumulación de pintoresquismos y exhuberancias que colmaron tu empirismo vital. Para encontrar lo ancestral y mitológico que sos.
Vos me decías de la gente ocasional que me rodeara en Galicia o en Buenos Aires: "Ellos te quieren bien, pero mejor si los dejás con ellos mismos. Hacé lo tuyo".
Supongo que moriré antes de concretar el "Antonio", pero estamos en el inconciente humano. Somos eso.
Un abrazo hermano:
Yoel

8 comentarios:

Recuerdo que cuando murió la madre del doctor Pérez Prado. Para el velatorio puso el cadáver en un ataúd de los que por entonces daba el PAMI y que parecían cajones de manzana más que ataudes. Cuando lo criticaron por eso, el doctor dijo: "Los homenajes hay que hacerlos en vida. Ahora ya no importa".

Yoel, soy Monica, la mamá de la ahijada deAdriana Martegani, la amiga de Adriana durante casi 40 años¿Sabés de qué Adriana hablo?
De la mujer de Lalo, a la que le ofrecio matrimonio y ella lo rechazo, porque la oferta llegó demasiado tarde, la que desde sus 26 años fue SU MUJER, la mujer de un solo hombre al que amó con locura, por el que se desvivió, hasta descuidar su cáncer y acelerar sumuerte por atenderlo en el 2006 cuando Lalo enfermó.
La que vivio con el desde que Doña Fe falleció, le dio de comer, le lavó la ropa y le fue infinitamente fiel
¿Como podés decir que Graciela Mosquera fue su mujer durante 40 años?. Hacia 41 años que Adriana estabajunto a el cuando ella falleció, el 7 dedicie,mbre de 2006.
Entonces, Antonio, tenia dos mujeres?
No sé cómo te la contaron, pero yo conozco y muy bien la otra historia
Por favor queiro que me respondas a esto que te digo,si tenes alguna respuesta, porque para mi es muy importante
Creo queen el homenaje se borraron de un plumazo 40 años de lavida de Lalo con Adriana, de los que tengo mucho que contar, mucho!!!!.
Por Dios, quese haga justicia ! A Adriana Martegani la mataron dos veces!!!!!
te dejo mi correo: mcecilia131415@yahoo.com.ar
Me gustaria mucho hablar con vos
Monica Cecilia Gentile, amiga de Adriana Martegani y de Antonio Perez Prado

No me escribas a elbosqueolvidado, ni al blog, escribime al correoque te dejé

Lalo Perez Prado tuvo muchas mujeres...algunas más perseverantes y con las que compartió más. entre otras yo misma...soy la hija del por supuesto ya fallecido Dr Vilá jefe de hemoterapia del hospital Fernandez y del Centro de hemoterapia dode conoci a lalo cuando tenia 16 años. en ese entonces estaba casado con la mamá de Aixa Ximena...quien no soñaba con nacer..la dra B Grisolía...luego se separó....su niña se fue a Estados Unidos con la mamá,,,,en uno de sus viajes,creo a Holanda...se cruzó con una hindu Anaar Naram con quien también tuvo un hijo....conoci a Adriana Martegani.porque hizo el curso de técnica auxiliar de hemoterapia con mi padre y era excelente...joven alta.hermosos ojos claros---y lamento que ya no esté entre nosotros...muchas veces le pregunté por ella en alguno de nuestros encuentros...en un depto de san Telmo...no en su casa de la calle Salta...en fin....hay muchos secretos no develados...y quedarán asi....como parte del anecdotario...nunca supe que existiera una señora Graciela...me acabo de enterar....Dios los bendiga a todos y sean felices.

Yeshe. Tu bendición para todos los que conocieron a Antonio, es así. A mi, él, me contaba de sus amores, pero sonaba a cuentos de las mil y una noches. Yo sonreía y él seguía diciendo barbaridades espectaculares que merecían lo máximo de mi respeto y cariño.

Yoel amigo a quien no conozco pero hemos compartido el mismo cariño por una misma persona. Lalo o Tony era un ser motivado por la cultura, la fina ironía, su gusto por sentirse anárquico-monárquico como se autodefinía...sus relatos del Camino de Santiago....Los gallegos y Buenos Aires y el portaobjetos...y sus increíbles imitaciones de J L Borges que fue profesor mío en literatura inglesa en la Facu de filosofía y letras...creo que amó mucho la vida y poco a las mujeres...Dios les bendiga a todos por los buenos momentos..por esas horas azules en ese monoambiente de la calle Moreno....las mentes abiertas, no aferradas a un ego de acero son las más felices...me encanta esta conexión epistolar cibernética...una pena que Lalo se fue de gira...hoy nos hubiéramos encontrado tomando algún vino fino en una taberna...filosofando sobre la utilidad del mosquito o la danza de los hematíes y me hubiera reído tanto....mi correo es aniyeshe@gmail.com...por si algún día quisieras escribir....perdón...a todos los errores que pudo haber cometido...nadie es lo tan puro para levantar su dedo acusador...nada es tan hermoso como lo soñamos ni tan feo como lo tememos!

ahi donde dice "lo" está demás...

Jorge Luis Borges

Lectores



De aquel hidalgo de cetrina y seca
tez y de heroico afán se conjetura
que, en víspera perpetua de aventura,
no salió nunca de su biblioteca.

La crónica puntual que sus empeños
narra y sus tragicómicos desplantes
fue soñada por él, no por Cervantes,
y no es más que una crónica de sueños.

Tal es también mi suerte. Sé que hay algo
inmortal y esencial que he sepultado
en esa biblioteca del pasado
en que leí la historia del hidalgo.
Las lentas hojas vuelve un niño y grave
sueña con vagas cosas que no sabe.