LA MANO QUE APRIETA

sábado, 21 de noviembre de 2009

interruptus

Por mis venas corre sangre de aborigen europeo. Mis raíces se pierden en los montes de Ourense (Galicia). Eso es tan ignoto que no lo entiendo, no lo entiendo casi tanto cómo me cuesta entender el haber nacido nesta ciudad del sur americano.
Será que hice todo al revés. En juventud conocí el continente americano y de Europa nada. Ya convertido en un hombre maduro, mi madre sentenció: "Siempre has hecho lo que has querido". La vieja sabía que nunca se consigue lo que se quiere, e irradiaba compasión. Otro de sus consejos cuando yo me encontraba en pleno periplo latinoamericano, fue:"Ni se te ocurra ir al Viñao a pedir limosna".
El tiempo y sus muertes me dejaron aquí, en plena vejez colmada de baches memoriosos...

0 comentarios: