LA MANO QUE APRIETA

martes, 10 de marzo de 2009

sala de espera ("Esperita")

La sala de espera casi siempre estaba llena, o por lo menos un cupo del 50% de esperadores estaba presente.
Nadie sabía el porqué de la asistencia y todos lo intuían.
La esperanza latía porque las razones esperativas eran todas diferentes, rajantemente diferentes...
Ahora
Hoy
La esperanza es tan inmensa que no hay nadie.

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