LA MANO QUE APRIETA

lunes, 30 de marzo de 2009

el fantasma Benito

Benito era buenito.
Yo creía que los muertos envidiaban a los vivos y que por eso los dañaban, entonces a los fantasmas les tenía miedo. Benito me desmintió ese prejuicio mostrándome como se divertía. Era una burbuja de jabón que me hacía reir.
En su vida de ultratumba rechazaba la invisibilidad y compartía amenas charlas con los vivos, provocando en sus contertulios, nuevas costumbres y vicios.
Tenía aspecto de nube envuelta en sábanas (pompa) y nunca contaba quien y cómo fue en vida. Era gordito.

comentarios:

Eusebio Gómez dijo...
31 de marzo de 2009, 8:51
 

¿Benito?... ¿Mussolini?
A mi se me aparece el fantasma de Franco y se toma un par de copitas de licor café. Es un fantasma amarronado y dice mucho "lerelelé".