aparador con llave

Todo era según el cristal con que se mirara. Flor de joda porque la acción no era meramente contemplativa, había un toqueteo de materia viva y de materia inerte y aparecían substancias nuevas, algunas corrosivas, otras vertiginosas y todas así como aparecían, desaparecían, por más cambio de cristalerías para mirar.
Los roperos y armarios se fundaron bajo esos parámetros para guardar las dimensiones de la vida práctica, la empírica. Así los practicantes de la compra-venta, valoran la experiencia acumulada en los cristales y los tasan. Saben que cuando el cristal es de calidad, lo que se vió -y está por verse- es óptimo (así la visión sea negativa) y eso es lo que cotiza.  

"Meteoro". Clarin. 20-oct-2014.-