LA MANO QUE APRIETA

sábado, 13 de septiembre de 2014

bostalgia albañal

En casa siempre hubo gatos a deshora. Sucedían a través de ventanas y puertas. Algunos aparentando ser pumas, robaban con violencia panqueques con dulce de leche y los comensales saltábamos sobreseídos poseídos del repente las magnolias y los claveles. Soñábamos con un mundo peor y los gatos de terraza cuando hervían de calentura, rompían los techos y volteaban los muebles, a veces buscando esconderse del destino inevitable. Ahora no veo gatos ladrones. Alguien se los comió.

Depardieu. Clarín. 16-sept.-2014.-

2 comentarios:

¿Cuál es el destino inevitable de los gatos? - Que otro gato les rompa el culo.

Volaban como cañonazos!