LA MANO QUE APRIETA

miércoles, 7 de enero de 2009

pésame

Me autoperdono por calcular sin lograr contabilidades
por nunca haber aprendido a jugar al balero
por lo que me faltó hacer
por aplastar a la mosca letárgica imprevisible
por la constancia y la inconstancia
la responsabilidad y la irresponsabilidad

Me autoperdono por cobardía
y eso no tiene perdón.

comentarios:

"Un acto cobarde, lo cometerìa si fuera en mi beneficio" lo dijo Napoleòn, si los actos cobardes necesitaran perdòn, los humanos serìan criaturas imperdonables, eso, somos imperdonables, creo.